miércoles, 5 de noviembre de 2008

LECCION TRES

"Los malvados del guión"

Hay que tener presente que los malos de la historia son los que realmente dan el sabor a la aventura. Debe buscarse en ellos la justificación u origen malévolo de sus acciones. También como en los casos anteriores deben buscarse sus cualidades. Que sean malos no quiere decir que sean tontos o estúpidos (aunque pueden serlo en algún caso, por supuesto). Incluso en las historias épicas pueden tener hasta "su fondo de justificación" en el honor, por ejemplo.
Este tipo de personajes, aunque aparezcan menos tiempo en la narración que el héroe y sus amigos son igualmente importantes que los primeros porque generalmente significan la amenaza, la adversidad, el obstáculo a vencer.
Hay ejemplos clásicos en literatura y cine sobre el hecho de que el malo puede ser hasta incluso el personaje principal del relato. Ejemplos: Drácula, Frankestein, La Momia, Ella-Ayhesa, Fu-Manchú, El Dr. Mabuse, El abominable Dr. Phibes, El hombre-lobo, etc. y quiénes lo combaten están en segundo plano. ¿O alguno se acuerda como se llamaban los que lucharon contra tales enemigos? Basta razonar solo en este tipo de detalle para entender la importancia que tienen. Por lo tanto, enriquecerlos guionísticamente sin duda contribuirá a que el relato cobre mayor voltaje.

TRABAJO PRACTICO


Idem a los anteriores. Describir su carácter, su idiosincrasia, las razones de su maldad. Efectuar secuencias de relato que los resalten.